El terrier ruso negro es un perro duro, resistente a diversas condiciones ambientales, no susceptible a enfermedades, con un temperamento equilibrado, alerta pero no hiperactivo. Desconfía de los extraños, es valiente y seguro de sí mismo. Es perfecto para entrenar y aprende muy rápido. Le encanta trabajar con su guía, no le gusta la monotonía. Funciona muy bien como guardián de nuestras pertenencias. Pero no es un perro 'para una perrera', no es apto para un corralito, le encanta estar rodeado de sus dueños, aunque no es un perro imponente. Su tamaño no molesta ni siquiera a un apartamento pequeño. Por lo general, se acuesta en un lugar tranquilo y observa su entorno. Gracias a su inteligencia, puede evaluar perfectamente el grado de amenaza, reaccionando solo cuando decide que la situación lo requiere.